Artículo elaborado por Gescooperativo, Sociedad Gestora de Instituciones de Inversión Colectiva del Grupo Caja Rural.
Cumbre COP 26
Hasta el 12 de noviembre los máximos dirigentes mundiales se reúnen en Glasgow en la cumbre internacional sobre el cambio climático, en la que se espera alcanzar acuerdos para solucionar la mayor amenaza a la que nos hemos enfrentado hasta ahora.
La celebración de la COP26 ha arrancado con grandes interrogantes respecto a cómo pueden conseguir Gobiernos y empresas el objetivo de reducir el calentamiento global y en un momento en el que la crisis energética se encuentra en su punto más álgido.
Estados Unidos y la Unión Europea lideran la cumbre con dos grandes acuerdos: nuevos aranceles a las emisiones de CO2 y la reducción de las emisiones de metano.
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Pacto contra la emisión de metano
La presidenta de la Comisión Europea ha asegurado que la UE aplicará un arancel al CO2 que emiten productos como el cemento, el acero, los fertilizantes … a partir de 2023. La medida busca presionar a la comunidad internacional para que también grave las emisiones de efecto invernadero.
Por su parte, Estados Unidos ha anunciado nuevas normas para controlar las emisiones de metano que resultan de la perforación de la Tierra para la obtención de petróleo y gas. Su propuesta ha conseguido sumar a más de 100 países, que representan en conjunto el 70% de la economía mundial y la mitad de las emisiones de gas metano, con excepción de China, India y Rusia.
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Acuerdo para frenar la deforestación
Además, un centenar de países, que albergan el 85% de los bosques mundiales, se han comprometido a revertir la deforestación y la degradación de la tierra para 2030. La propuesta lanzada por Boris Johnson contará con 19.200 millones de euros de financiación pública y privada en todo el mundo, hasta 2025.
¿Qué ha ocurrido en los mercados de renta fija?
El mes de octubre ha estado marcado por el aumento en las expectativas de inflación y las dudas sobre si ésta terminará siendo más prolongada en el tiempo de lo que se preveía hace unos meses, lo que afectaría de forma negativa al crecimiento económico. La cadena de suministros sigue tensionada por el alto coste de la energía y los cuellos de botella generados durante la pandemia.
Sin embargo, el BCE, pese a reconocer que la inflación está durando más de lo esperado, sigue defendiendo la temporalidad del repunte de inflación. Además defiende mantener los programas de compras de activos de manera moderada y decreciente, mientras los tipos de interés se mantengan sin cambios.
¿Y en las bolsas?
Pese a la preocupación por las presiones inflacionistas, la falta de alternativas de inversión junto a la prudencia de los bancos centrales y la alta liquidez existente continúan dando impulso a las bolsas.
Octubre ha sido un mes muy positivo para las bolsas mundiales, con la excepción de las bolsas emergentes, que tuvieron un comportamiento plano, y de la bolsa japonesa.
Hemos entrado en periodo de presentación de resultados empresariales y hasta la fecha, están batiendo las estimaciones de consenso. Sin embargo, las guías que están proporcionando las compañías sobre sus resultados futuros reflejan en muchos casos, la incertidumbre y el impacto que la inflación está teniendo en muchas compañías. Este es uno de los principales riesgos a los que se enfrentan los mercados y, sin duda, una de las principales variables que tendrán en cuenta los Bancos Centrales ante la inminente decisión de retirada de estímulos monetarios (más evidente en EE.UU. que en Europa).
Consecuencias de la cumbre COP26 para los inversores
Desde el punto de vista de las inversiones, las decisiones que se tomen en el COP26 afectarán a sectores como la energía, logística, transporte aéreo y agricultura que, por registrar todos ellos, niveles elevados de emisiones de carbono, juegan un papel fundamental en la creación de un futuro más sostenible. Las empresas que adopten decisiones encaminadas a reducir emisiones de CO2 conseguirán posicionarse mejor estratégicamente y captar el interés de los inversores.
Además, el medio a través del cual los Gobiernos financiarán las inversiones que se lleven a cabo para mitigar el impacto en el clima será, de forma mayoritaria, la emisión de bonos verdes. Como dato a destacar, la emisión de bonos verdes, sociales y sostenibles ha crecido de forma significativa en los últimos años superando los 700.000 millones de dólares en 2020.
En Gescooperativo disponemos de una gama de fondos sostenibles que suma actualmente más de 1.300 millones de euros en patrimonio gestionado y muestra nuestro compromiso con la Inversión Socialmente Responsable.